¿Qué compuestos nocivos se encuentran en los jabones sintéticos?
[Margarita, Granada]
Muchas de las substancias químicas presentes en los productos de higiene habituales producen efectos negativos tanto en la salud humana como medioambiental, ya sea a través de la interacción directa con el cuerpo o vehiculada por el agua que se va por el desagüe de nuestros hogares. No deja de ser una paradoja que “limpiando” nuestro cuerpo, ensuciemos nuestro entorno, que de hecho es parte de nosotros.
La mayoría de geles y champús contienen una mezcla de detergentes:
- derivados del petróleo, el más usado de los cuales es el SLES (sodium laureth sulphate), que también se puede obtener de aceites vegetales.
- derivados de aceites vegetales, sobre todo de coco y palma, por ejemplo el sodium cocoamphoacetate.
- derivados de la glucosa, como el decyl glucoside, que son menos agresivos para la piel y menos contaminantes para los ecosistemas acuáticos.
Las sustancias más controvertidas, por sus efectos perniciosos (contaminación ambiental y daño en nuestro organismo), son las siguientes:
- Glicoles (a menudo identificadas por las siglas PEG o el sufijo –oxynol). Irritan la piel y contaminan los ecosistemas acuáticos.
- Parabenes (o hydroxybenzoate). Conservantes disruptores hormonales y muy alergénicos.
- Perfumes. Hechos a base de aceites esenciales (algunos de los cuales son alergénicos) o una copia sintética, y otros componentes como almizcles sintéticos, que son disruptores hormonales.
- Formol (o formaldehyde). Conservante bastante alergénico, puede causar asma, y además es cancerígeno. Muy fácilmente absorbido por la piel.
Además existen colorantes sintéticos peligrosos (identificados por las letras CI seguidas de un número) y algunos productos higiénicos contienen microbiocidas (como el triclosán) que no sólo eliminan todo tipo de microorganismos (la mayoría de los cuales son beneficiosos para nosotros), sino que también hacen que determinadas bacterias creen resistencias a antibióticos, con lo que cada vez resulta más difícil superar enfermedades (como la tuberculosis) con tratamientos farmacológicos hasta ahora eficaces y baratos.
Cabe decir que, a pesar de la peligrosidad de dichas sustancias, no están prohibidas. Entonces, los ingredientes a evitar en las etiquetas de nuestros geles o champús son especialmente (con o sin prefijos y sufijos, y casi siempre escritos en inglés): glycol, PEG, -oxynol, paraben, hyroxybenzoate, isothiazolinone, formaldehyde, parfum. Mientras que los ingredientes recomendables son glucoside (a base de glucosa) y plantas (normalmente en las etiquetas constan en latín, por ejemplo Lavandula officinalis –lavanda-, Thymus sp. –tomillo-, Rosmarinus officinalis -romero-) mejor si son extractos de plantas, puesto que algunos aceites esenciales (oil) pueden despertar alergias. Recordar que los ingredientes en la etiqueta se declaran en orden decreciente de cantidad.
