Cómo me podía perder la primera feria de la bicicleta activa que se celebra hasta este domingo (9 de abril) en esa montaña, parque y laberinto cultural que es Montjuïc, en Barcelona. De ninguna manera ha podido ser, y como buen paisano a pedales allá me he plantao, montao en mi bici y con ganas de ver de qué iba ese rodado evento.

Eso sí, a uno que sólo le interesa lo que es bici, urbanidad y disfrute cicloturista, una feria donde se han anunciao saltos y piruetas sin emisiones de CO2, aunque no sea tema de interés directo, pues sí, también me ha llamao la curiosidad.

Nada más entrar el espacio de la organización me ha deparao algunas sorpresas. En institucional de la Mesa Cívica del Vianante y la Bicicleta con los chicos del BACC, algo así como el real automóvil club pero sólo para bicicletas me ha servido para enterarme entre otras cosas de que existen dinamos de buje exterior que se activan con sensor de penumbra, es decir, cuando cae la noche la luz de faro se activa automáticamente.

También me he enterao de una fabulosa bicicletada popular que el domingo 7 de mayo recorrerá la cuenca del río Besòs desde Granollers a Barcelona, y como el Besòs fue el río cloaca que me vio correr cuando no levantaba más de medio metro, saber que ahora se recorre entre tramos con excelente carril bici y que sirve para que la Diputación de Barcelona convoque pedaladas colectivas, me ha gustado pero que mucho. Lástima que no podré estar.

Bueno, y lo del 1º Congreso Catalán de la Bicicleta, del 7 al 11 de junio próximos, vamos, esto ya me ha desbordao na más entrar. Durante 4 días expertos mundiales, planificadores urbanos, promotores de la movilidad sostenible, explicarán su experiencias a los asistentes. Convoca la Generalitat, el ayuntamiento de la ciudad y otras entidades. Joer qué impacto, la primera feria de la bici activa, el primer congreso de la bicicleta, la primera vez que intuyo que estamos inmersos en un fascinante proceso de modernidad ecológica donde la bici es la estrella suprema, y la más rápida y limpia de todas las del firmamento de la movilidad.

No muy lejos el activista Francesc Baselga con su bólido Twike a pedales y eléctrico, andaba mostrando a unos y otros lo que la tecnología y el diseño para la movilidad sostenible hi tec pueden crear. 

Pon salud en tu bici, una sugerente y bonita pancarta parida por la Fundación Terra para su campaña con ese mismo nombre, y delante una Dahon Vitesse equipada con sillín Duopower, aquel que no toca los c...., es decir, que no molesta para nada a la zona perineal; también con un ROTOR, ese revolucionario sistema del pedaleo que elimina el punto muerto y del que he tenido el gusto de escuchar de boca de uno de sus promotores, como dieron, después de 100 años de intentos por otros, con el quid de la cuestión y ahora andan revolucionando el mundo a base de tecno-lógica de primer nivel. Chapó.

Ahora, lo del cambio interno me ha seducido, y es que he podido probar una bici con un cambio de velocidad interno que es realmente fascinante. Llegas al semáforo con una velocidad larga, y en un plis plas pasas a la más corta, y arrancas a pedalear sin esfuerzo, que es bueno para la salud, vamos, te lo digo yo que flipo con mi cambio de toda la vida cuando no me acuerdo de que no es interno.
Dice también la campaña lo importante que es tomar medidas de la bici para llevarla a puntos óptimos de alturas, distancias y hábitos del pedaleo. Otra vez Fundación Terra comienza a armar una de las suyas, esta vez porque de sobras quizás ya sabes lo que en esta organización se quieren a las bicis, pues ahora la historia de amor se dirige hacia la salud que todo ciclista puede tener a un golpe de pedal incorporando buenos hábitos y buenas tecnologías. No te pierdas su espacio dedicado, con sumo cariño, a la bicicleta.

Mientras todo esto me seducía, un montón de chavales pegaban unos brincos con las bicis que quitan como el hipo y alegran el alma, al hacer tanto sin consumir nada sucio para moverse.

Ahora, un inflable a modo de circuito, allá a lo lejos, me ha hecho flipar, pensando desde la vista en el horizonte que por el interior corrían karts, cuál ha sido mi sorpresa cuando me encontrao con los BalanzBikes, un triciclo a pedales cargado de ingenios basculantes, donde las habilidades de los chavalotes hacían maravillas, vamos que corrían hasta más que los que queman petróleo y hacen ruido infernal. Oleé la diversión sin CO2.

Un circuito de bicicletas eléctricas dale que dale todo el rato, permite probar triciclos y bicis a gogo. Mientras, en la pista de montones de tierra, rodillos gigantes de cable eléctricos y bidones, un montón de bici acróbatas, venga pegar saltos increíbles.

El guarda bicis a la entrada del Palau Sant Jordi, estupendo, dejas la bici, enseñas el DNI, te cogen el número y el nombre y te dan un ticket, cuando regresas presentas el ticket y el carné y pedaleando te vas, pedaleando vienes...joer, lo de pagar un euro, no lo acabo de entender, pero en fin.

Ya en el interior de ese escarabajo negro, es el aspecto simpático de la cubierta desde lejos de esa obra de ingeniería deportiva, el rumor lejano de bullicio tranquilo ponía la melodía de que se llegaba a la feria comercial dedicada a la máquina verde en todas sus versiones, urbana, de montaña, de carretera, curiosas, plegables, de ciudad, raras, reclinadas, y hasta sorprendentes. No hay que perderse el stand de Rotor, con las novedades y los técnicos de primer nivel para informar al dedillo lo fácil que es eliminar eso que no hace falta, el punto muerto del pedaleo. En frente, el stand de la tienda Bike Tech, que distribuye la plegable histórica y de sorprendente plegado, la Brompton. Y es en ese están donde me he encontrao con un paisano que atención, lleva desde el año 1962 sin volver a su casa, ha recorrido 550 mil kilómetros en bici, visitado todos los países del mundo y realizado 100.000 diapositivas. He alucionao, y embobao me he quedao escuchando anécdotas contadas con su mítica bici en las manos, con la que lleva más de 44 años, eso sí, modificándole cosillas de vez en cuando. Bueno los portabultos, como de hace dos siglos, de piel desgastada y su sonrisa y buena pinta de abuelete enrollao vendiendo sus postales, vamos, bien me ha valió la visita.

Si con los karts a pedales he flipao, con la oferta escolar de triciclos y los coches a pedales de Berg Toys, bueno, maravillao me he quedao. Al rato, el stand de Espai Bici, esos caballeros y damas de la bici urbana, elegantes y doctores en el tema de mi mayor interés, me han mostrao el Pinhead, un kit de seguridad para ejes de ruedas y sillines, que aun siendo una inversión de 55 euros, hace el choriceo casi imposible a los mafiosetes. Bicis de 6.000 euros, de descenso deportivo, "fashion a tope" no una sino varias, a la vista están y yo me quedo igual, aunque admirando la tecnología espacial que la venerable máquina verde incorpora para esas modalidades.

Bueno, y ya me voy que si no al empacho me acostumbro. Ya al salir, la gran pantalla del recinto me ha regalao unos minutos de más flipe. Una empresa italiana fabricante de sillitas de críos para bicis mostraba sus ensayos de reacciones al choque o impactos, la comodidad de la amortiguación, la seguridad del balanceo. Bueno, la guinda, no pensé que se tomaran tan en serio los accesorios de las bicis.

¡¡Ahh!! Amics de la Bici, esa organización asamblearia de activistas de la bicicleta a la que tengo en sumo gusto de poder pertenecer, me los he encotrao en un pasillo con todas las fotos seleccionadas de las seis ediciones del concurso fotográfico Memorial Vicent Bagan. Me han informado de los festejos que se están preparando para celebrar el 25 aniversario de nacimiento de la entidad, oye, que entre otros habrá la 3ª marcha ciclonudista, con el hermoso y activista lema de desnudos ante el tráfico. Allá estaré, mostrando mis intimidades, sobre todo el culete, a los coches detectados como de mal usados de atrás, jejeje.

Si te gusta la bici, la acción y el mundo de la máquina más verde de todas las conocidas, y sobre todo si quieres conocer a primer nivel el maravilloso mundo de las bicis urbanas por excelencia, Dahon y Brompton muestran todas sus novedades, no te pierdas BikeShow, bueno, y si subes en bici hasta el guarda bicis de la entrada, tienes premio. Me han dicho, que por el mérito y el compromiso, si te vas directo a stand de Spaibici y les dices de tu acción, igual te pasan una matrícula que simboliza algo tan real y palpable en la feria, y es que todo todo se mueve NO OIL y sin ruido. Oleee.