La película pretendía estrenarse el 5 de Noviembre del 2005, aniversario del intento de atentado contra el Parlamento británico, pero parece que debido a los ataques en el metro de Londres se retrasó la proyección.

En un estado totalitario, basado en la coacción por el miedo a supuestas amenazas exteriores, un personaje enmascarado y misterioso proclama que los ideales son inmortales y son más fuertes que cualquier arma. "La gente no debería temer a sus gobiernos, son los gobiernos quienes deberían temer a la gente", repite incansable el misterioso V mientras insta a la gente a alzarse contra un gobierno tirano, emulando la gesta de Guy Fawkes, un soldado católico británico que el 5 de Noviembre de 1605 estuvo a punto de volar el edificio del Parlamento inglés para asesinar a Jaime I de Inglaterra y su gobierno.

La acción de la película se sitúa en una Inglaterra futura, aunque no lejana, con una población que vive aislada, temerosa de los ataques del mundo exterior y bajo las consignas de un régimen totalitario, neofascista y personalista que a través de un inmenso aparato progandístico dice velar por la seguridad de sus ciudadanos a cambio de reprimir sus libertades más básicas. La persecución contra homosexuales, prisiones perpetuas, la inexistente seguridad jurídica, torturas y campos de concentración para quien ose alzar la voz contra el régimen dictatorial -democráticamente elegido-, la prohibición de religiones, la inexistente libertad de expresión o de reunión, el circuito cerrado de televisión al más puro estilo de George Orwell en 1984 o el toque de queda y la todopoderosa y omnipresente policía, nos muestra una sociedad sumida en un status quo aceptado y tolerado por la mayoría de la población que, asustada y estigmatizada por un pasado lleno de sangrantes ataques terroristas, acepta su pérdida de libertades a cambio de una supuesta tranquilidad y seguridad en la vida diaria.

La película está basada en el cómic V for Vendetta de Alan Moore y David Lloyd que situaba la acción en la Inglaterra de 1997. Moore criticaba la administración del Partido Conservador británico y preveía que en el futuro ganarían las elecciones el Partido Laborista, el cual ya en el poder sacaría las instalaciones militares nucleares del territorio británico para evitar que el país no se involucrara nunca en una guerra nuclear. De esta forma, el paisaje de V de Vendetta muestra el mundo tras una guerra nuclear que ha destruido el resto de Europa, pero donde una Inglaterra débil pero sobreviviente, está sumida en un estado de caos donde el fascismo del partido político Norsefire emerge fácilmente.

Mítin del líder del régimen de Norsefire, conocido como "El Partido". "Fuerza a través de la unidad. Unidad a través de la fe", lema básico de propaganda del gobierno contra el que V combate

La adaptación al cine que en el 2006 hicieron los hermanos Wachowski recibió algunas críticas porque evita las referencias directas al anarquismo del que la publicación original hacía gala, o porque cambia la perspectiva del campo Larkhill o porque terminan la cinta con un final más conclusivo del que tenía el cómic. Pero realmente lo que los hermanos guionistas parece que trataron de hacer fue una adaptación actualizada intentando mantener una atmósfera fiel a la del cómic, pero incorporando ciertas temáticas actuales como el terrorismo global, los ataques biológicos, el recrudecimento de los fanatismos religiosos o la coacción de las libertades individuales en nombre de una supuesta seguridad colectiva. V de Vendetta muestra sin vergüenza la perversidad de un gobierno donde la mentira, la coacción y la impunidad frente a la violación de los más básicos derechos humanos son útiles herramientas usadas sin perjuicios para mantenerse en el poder, enriquecerse y controlar una asustada población bajo los delirios de grandeza de un gobernante déspota y patriarcal superado por su propio ego. Aunque considerado un filme de acción y ciencia ficción, desgraciadamente, la imagen del régimen de Norsefire resulta, hasta cierto punto, de una familiaridad muy actual. Al igual que la imagen que se transmite de una sociedad cobarde y adormecida, encarnada por Natalie Portman en el papel de Evey, inicialmente convencida por el inmenso aparato propagandístico de que no hay opción mejor que la que se tiene, que las amenazas de caos y terror son tales que la única respuesta posible es el sacrificio de las libertades propias y donde el miedo a lo desconocido frena cualquier intento de revolución. V es capaz de despertar a una sociedad entera con el poder de las palabras hacia la revolución, -primero interior y luego exterior-, apelando a recuperar la naturaleza humana y a madurar para reconocer lo que deseamos como sociedad.

Algunas curiosidades

Alan Moore, coautor de la publicación original se desentendió de la producción de la película por considerar que cambiaba el mensaje original al convertir "V" en un luchador por la libertad en lugar de en un anarquista. Señalaba que el guión de los hermanos Wachowski había convertido su cómic en "una parábola de la era Bush realizada por gente demasiado tímida para montar una sátira política en su propio país... Esta película es una impotente y frustante fantasía liberal norteamericana de alguien con valores liberales norteamericanos frente a un gobierno gestionado por neoconservadores - que no era de lo que el cómic V for Vendetta trataba. Era sobre fascismo, era sobre anarquía, era sobre Inglaterra". Más tarde añadió que si los Wachowskis pretendían protestar sobre lo que ocurría en América, deberían haber usado una narrativa política que hablara directamente sobre temática estadounidense, de forma similar a lo que hizo Moore con Gran Bretaña.

La cultura popular inglesa dice de Guy Fawkes que fue "the only man to ever enter Parliament with honourable intentions". Y hasta en el álbum de John Lennon de 1970 John Lennon/ Plastic Ono Band, Lennon canta "Remember, remember, the 5th of November" en la canción "Remember". La letra termina con el sonido de una explosión.