Este manifiesto es la forma con que los editores de la revista La Fertilidad de la Tierra (que inició su andadura el 21 de junio del 2000 para ser un referente en el mundo de la agricultura ecológica) celebran haber llegado al número 50. El equipo de la revista ha elaborado el “Manifiesto por La Fertilidad de la Tierra” como decálogo ante los retos tan urgentes a los que esta sociedad se enfrenta. Con este manifiesto reafirman su compromiso de de seguir contribuyendo a difundir la idea de que tenemos la libertad de elegir qué comer y qué agricultura hacer, y la certeza de que juntos podemos lograr un cambio.Transcribimos su espíritu y letra.
Futuro: Alimentar un Planeta cada vez más poblado es un reto al que se enfrenta la agricultura del futuro. Lejos de las soluciones reduccionistas que se plantean desde el agronegocio (transgénicos, monocultivos), el verdadero camino perdurable es incrementar tanto la fertilidad latente de la tierra para obtener alimentos de gran vitalidad, como la superficie dedicada a una agricultura y ganadería respetuosas con el entorno.
La agricultura es un patrimonio de la humanidad, una herencia de siglos transmitida con amor para el gozo de la salud de las personas. Foto: Fundación Tierra.
Ecología: Los ecosistemas naturales mantienen su fertilidad gracias al maravilloso diseño de los ciclos naturales. La agricultura debe mirarse en ese espejo para conseguir el mismo objetivo.
Responsabilidad: Tenemos en nuestras manos (agricultores, ganaderos, consumidores, técnicos, investigadores…) la responsabilidad de guiar correctamente esa riqueza que se nos entrega para alimentarnos. Nuestra elección debe ir siempre hacia mantener o mejorar ese bien.
Transformación: La tierra es sabia y transforma los residuos y desechos que no queremos en nutrientes y vida para los cultivos y los pastos. No rompamos esa capacidad incorporando tóxicos y contaminantes.
El agricultor, la agricultura, debe colaborar con la tierra para mejorar su fertilidad. Foto: Fundación Tierra.
Identidad: Los pueblos se identifican con sus paisajes, sus variedades cultivadas y razas autóctonas, su cultura. Conseguir alimentos originales con su verdadero aroma y sabor, y su sublime calidad, y la conservación del patrimonio natural van de la mano de una tierra fértil que alimente los árboles, las plantas y los animales.
Laboreo: El agricultor, la agricultora, deben colaborar con la tierra para mejorar su fertilidad. La tierra es “sagrada”. Evitemos alterar los horizontes, destrozar la estructura o realizar prácticas agresivas. El balance adecuado de aire, agua, tierra y calor, los cuatro elementos, es la esencia para una producción perdurable en el tiempo. Larga vida al humus.
Investigación: La forma en que la Naturaleza mantiene y mejora la fertilidad de la tierra está ahí para ser observada, investigada, estudiada, comprendida y divulgada. La ciencia debe estar al servicio del bien común, no en manos de los intereses económicos de una minoría.
Diversidad: La vida en una tierra sana es un abanico de diversidad. Cada organismo tiene su función y todos juntos trabajan de una manera armónica para conservar la fertilidad de la tierra.
Cada organismo tiene su función. El mosaico agroforestal es esencial para la conservación de la biodiversidad. Foto: Fundación Tierra.
Arte: La agricultura es el arte de cultivar la tierra, según el diccionario. La inspiración de agricultores y agricultoras, de ganaderos y ganaderas, el amor por su trabajo, debe hacerse materia en una tierra fértil que alimente al cuerpo pero también al espíritu del artista y del espectador.
Decálogo: Este decálogo es solo un inicio para que cada agricultor, cada ganadero, cada hortelano, cada jardinero, cada persona que tenga la fortuna de vivir en contacto con la tierra incorpore sus ideas, sus vivencias, sus esperanzas y sus ilusiones, pero también su compromiso con ella.
Hoy, La Fertilidad de la Tierra es considerada la revista estatal de referencia del movimiento de agricultura ecológica y cuenta con un amplio apoyo entre las asociaciones y entidades que promueven la agricultura ecológica. Esencialmente la revista es de suscripción pero también se distribuye a nivel nacional y se puede comprar en tiendas de productos ecológicos y en librerías. También editan libros temáticos en un catálogo esmerado de títulos. Puedes encontrar el amplio catálogo de libros publicados por La Fertilidad de la Tierra en la tienda de terra.org.