Si abandonas el coche en cualquier carretera, estarás transgrediendo la ley.
Los almacenes de coches que ya no se usan suponen una fuente de recambios para reparar tu actual vehículo.
Un cadáver revoltoso
Unos 2.000 conductores, cuando han de cambiar de coche, dejan el viejo abandonado en la cuneta de cualquier carretera. Además de crear una situación que potencialmente puede causar accidentes de tráfico, están transgrediendo la ley y favoreciendo la contaminación del medio ambiente.
Bueno para tu bolsillo, malo para el medio ambiente
En España, cada año se dan de baja centenares de miles de coches. Dar de baja un vehículo es una obligación legal que tenemos todos los propietarios de un automóvil. Solamente es necesario presentar el DNI y la documentación legal del vehículo a la Prefectura Provincial de Tráfico. Ahora bien, debido a que este trámite cuesta dinero, muchos propietarios irresponsables prefieren retirar las matrículas del coche, borrar el número de motor y de chasis y dejarlo abandonado en cualquier sitio de la carretera o del municipio.
Chatarreros, recambios a bajo precio
Un coche viejo tiene muchas piezas que pueden servir para reparar otros y, por tanto, reciclar poco a poco la mayor parte de sus componentes. Por ello hay chatarreros que dan este servicio: recoger los coches viejos y evitar que los vehículos se queden en la vía pública. Estos almacenes de coches inservibles son, a su vez, un lugar para conseguir recambios a bajo precio, lo que facilita que el propietario de un coche en servicio pueda repararlo fácilmente. Además, estos talleres reciclan la chatarra y otros productos como aceites, líquidos de frenos, plásticos, baterías... Lo único que hace falta, como ya empiezan a hacer algunos fabricantes de coches, es estandarizar los tipos de plásticos y otros materiales que forman la estructura y el motor del vehículo, con el fin de que sean fácilmente reciclables.
Resumiendo ...
Demos legalmente de baja el coche y llevémoslo a un chatarrero para que lo recicle.
Cuidemos del vehículo para que nos dure el máximo tiempo posible. No hagamos del coche un símbolo de ostentación, sino una herramienta de transporte para cuando sea necesario.
Aprender mecánica puede contribuir a alargar la vida de nuestro coche y evitar el incremento de chatarras de automóviles, que cada día son más numerosas.