Marzo, 2013.-Analizar un producto ecológico no es nada fácil y menos cuando se trata de un aparato eléctrico que requiere de sofisticados dispositivos para poderlo valorar. Merced a un voluntario de Fundación Tierra que tuvo acceso a un analizador de redes, un HT GSC 53N calibrado en laboratorio, -que cuesta algo así como tres mil euros-, hemos podido dilucidar algo más sobre este producto llamado "ahorrador de energía". Lo hemos visto a la venta en algunas de esas webs de "compras en grupo" como un producto ecológico y nos chirrió el argumentario comercial. Compramos uno para testearlo y resumimos en este artículo los principales resultados que hemos obtenido (al final del texto, las conclusiones ;).
Vista del aparato "ahorrador de energía" analizado.
Este aparato se vende con las siguientes prestaciones, según la publicidad proporcionado por el fabricante:
- Reduce la factura de la electricidad
- No necesita instalación
- Estabiliza la corriente eléctrica
- Contribuye a estabilizar las subidas de tensión
- Protege contra ondas electromagnéticas dañinas
- Se puede usar 24 horas al día, los 365 días del año
En las tripas del ahorrador
En pocas palabras, este "Ahorrador de Energía" dispone de un condensador y poco más. Estos artilugios electrónicos corrigen el llamado factor de potencia de cargas reactivas inductivas generando una reactiva capacitiva. El factor de potencia nos indica cómo se aprovecha la energía eléctrica y nos da una medida de la eficiencia del aparato. Los motores, transformadores, o las reactancias de los fluorescentes, tienden a empeorar el factor de potencia (que varía entre 0 y 1). Así, un factor de potencia del 0,8 significa que, del total de la energía suministrada, sólo un 80 % se utiliza adecuadamente para producir trabajo, -como hacer funcionar el electrodoméstico.
En el ámbito doméstico, que es para el que se vende este "Ahorrador de Energía", sólo se factura la llamada energía activa consumida, medida en kilovatios hora (kWh). Así, tener un condensador de estas características conectado a la red eléctrica de casa, -enchufado en cualquier enchufe de la red doméstica-, equivale a generar energía reactiva capacitiva en el sistema eléctrico del hogar. Una energía de la que normalmente los sistemas eléctricos domésticos están bajos, puesto que siempre hay más reactiva inductiva en las redes. Éste sería el principio por lo que el aparato mejora el rendimiento del sistema y facilita el ahorro de electricidad en una casa... en teoría.
Valorando el ahorro "real"
En el ámbito doméstico, las compañías eléctricas nos cobran por la energía activa, que es la que realmente consumimos, sin tener en cuenta el factor de potencia, -algo que sí sucede en las instalaciones industriales. Los desajustes entre ambos el ámbito doméstico son mínimos pues, como hemos dicho, tan sólo se producen por electrodomésticos con motor (lavadora, nevera, batidora, etc.). El hecho de enchufar un "Ahorrador de Energía" como el analizado en nuestra red permite modificar ligeramente la eficiencia y, por tanto, a la vista de nuestras lecturas con el medidor de redes, poder bajar en términos totales el “consumo” que tengamos.
El consumo energético de cualquier electrodoméstico viene determinado por las especificaciones del fabricante, -un dato legalmente obligatorio. En realidad, las opciones de consumo para que un aparato funcione no se pueden modificar, sin embargo, en términos de toda la red doméstica, un condensador puede corregir el factor de potencia de aquellos aparatos que generen reactiva y reducir la corriente que circula por la línea del hogar, afectando el cómputo total. El grado de afectación será un porcentaje que dependerá de las características de los aparatos electrodomésticos.
En las prescripciones de este "Ahorrador de Energía" no se da una medida concreta de ahorro pero, a raíz de la experiencia de valoración que hemos realizado, podríamos afirmar que no supera el 12 % en el mejor de los casos, - y no entre el 30% y el 35 % como indican algunos comercios. Hemos podido comprobar que este "Ahorrador de Energía" tiene un máximo efecto sobre un aparato cuando la unidad está lo más cerca posible del mismo. Por ejemplo, en nuestro caso enchufar un taladro en un enchufe cercano de donde tenemos el "Ahorrador de Energía", para que realmente haya un efecto de bajada del consumo que suma el contador eléctrico.
Por lo que hemos visto, en cuanto a modificación de ondas eléctricas, el aparato no genera perturbaciones significativas. Y, eso sí, tiene un consumo mínimo de 1, 34 Wh según hemos comprobado. Si intentamos determinar este valor de consumos eléctrico con un medidor doméstico tipo Envi-R o Efergy , el dispositivo medidor se altera y no da valores reales. De ahí que quisiéramos cerciorarnos utilizando un analizador de red calibrado. Así pues, este pequeño consumo del "Ahorrador de Energía" por funcionamiento varía según la carga de la red, pero en términos generales, su efecto es ligeramente favorable al contrarestar la reactiva inductiva.
Nuestras mediciones sobre el comportamiento del Ahorrador de Energía
Lo que hace el aparato es generar reactiva capacitiva con pf (factor de potencia) entre 0,44 y 0,5 c (c capacitiva, i inductiva). Esto hace bajar el consumo en una carga resistiva de 56,5 W a pf 1c, a 52,87 W a pf 0,49 c (pantalla 1-izquierda y pantalla 2-derecha).
En las siguientes imágenes se muestra la comprobación de que los monitores energía (tipo smart-meter) sufren una desviación importante porque sólo cuentan energía aparente. Con el factor de potencia (pf) 1c el analizador muestra 56,5 W y el Envi-R visualiza 52 W (pantalla 3 -izquierda, la diferencia entre las medidas es insignificante). Sin embargo, cuando bajamos el pf a 0,48c enchufando el ahorrador entonces el analizador lee 54,27 W, mientras que el Envi-R muestra 145 W (pantalla 4 -derecha), o sea que el descontrol es total.
Con una carga inductiva de 44,73 W a pf 0,44i sin ahorrador y de 41,20 W a pf 0,67c con ahorrador (pantalla 5 - izquierda y pantalla 6 -derecha),
En las siguientes imágenes puedes ver la deformación de la onda a (pantalla 7 -izquierda y pantalla 8 -derecha). La onda superior es la de la red, en este caso la de un inversor senoidal y la curva inferior es la provocada por el cambio en el factor de potencia).
También hemos podido observar (imagenes debajo de este párrafo) que en realidad el "Ahorrador de Energía" tiene un consumo propio de 1,34 W (pantalla 9 -izquierda). A su vez se aprecia la onda a pf 0,49 c (pantalla 10 -central), y la forma de esta onda a pf 1c, (pantalla11- derecha).
A la vista de los datos aportados por la experimentación todavía queda una duda y es que, según la opinión de algunos expertos, dado que el coseno de fi (cosφ) que es un número entre 0 y 1 y viene dado por el fabricante en las características de cada dispositivo, resulta que aunque se ponga un condensador y se reduzca la corriente (ya que el condensador tiende a aumentar simultáneamente el valor del cosφ en la misma proporción que se reducen los amperios), el resultado es que el valor de la potencia activa queda inalterado. Aunque por otro lado es cierto que la corriente (y la potencia reactiva Q) se reducen con un condensador y que las instalaciones industriales los usan.
Conclusiones
Los argumentos comerciales de este aparato "ahorrador de energía" están claramente magnificados:
- Ahorre energía eficientemente ayudando a proteger el medio ambiente > un poquito.
- Estabilice la potencia del voltaje protegiendo sus aparatos eléctricos > en redes estables como las de ciudades es mínima la variación.
- Alargue la vida de sus electrodomésticos > la mayor parte de la vida útil de los aparatos electrodomésticos está ligado a otros factores de uso.
- Fácil uso, no necesita mantenimiento, ¡Sólo hay que enchufar y listo! > sí, evidente.
- El principal objetivo del ahorrador de energía es permitir al cliente obtener un voltaje estable y prolongar el uso de los electrodomésticos > no es el voltaje el que se estabiliza.
- Reduce el recalentamiento de los electrodomésticos, prolongando su vida y reduciendo su coste > falso.
- Mejora el factor eléctrico y reduce el gasto > ligeramente.
En cualquier caso, con las mediciones facilitamos que se pueda tener una opinión más allá de la publicidad inexacta de los “ahorradores de energía”. Lo que sí es concluyente y que conviene recordar es que existen otros aparatitos para eliminar realmente el consumo eléctrico de los standby: si no te complicas, desde una simple regleta con interruptor en la que podamos cortar la corriente manualmente a los electrodomésticos. También hay otros más sofisticados (y caros) que detectan este consumo mínimo y cortan entonces la electricidad de donde hay el aparato enchufado.
Para conseguir ahorrar energía, creemos que lo mejor es poder visualizar nuestro consumo eléctrico para poder tomar medidas y pasar a la acción, para lo que existen múltiples dispositivos en el mercado, segun bolsillos y ganas.
Este artículo y las imagenes del mismo han sido elaboradas durante las mediciones del experto en renovables de la empresa Coeco Ricard Guiu para la Fundación Tierra.