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Paul Hawken recibió un doctorado honorífico en la Universidad de Portland, donde ofreció este discurso.
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En Blessed unrest
(Bendita inquietud), el autor Paul Hawken revela la revolución silenciosa que crece por toda la Tierra en múltiples frentes, en forma de pequeñas organizaciones medioambientales y sociales que pueden estar sentando las bases de una nueva era. |
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Paul Hawken (discurso original). Cuando fui invitado a dar este discurso, se me preguntó si podría dar una charla sencilla, corta, que fuese “directa, desnuda, expectante, honesta, apasionada, concisa, que diera escalofríos, asombrosa y elegante". Oye, sin ninguna presión.
Pero empecemos por la parte asombrosa. Ey, Promoción del 2009: vais a tener que imaginar lo que significa ser un ser humano en la Tierra en un momento en el que cada sistema vivo está en declive, y en el que la tasa de declive está acelerando. Es, de algún modo, una situación alucinante que puede llegar a aturdir, pero ninguno de los estudios de investigación contrastados publicados en los últimos 30 años puede refutar esa afirmación. Básicamente, la Tierra necesita un nuevo sistema operativo, vosotros sois los programadores y lo necesitamos en unas pocas décadas.
Este planeta vino con un conjunto de instrucciones de funcionamiento, pero parece que las hemos extraviado. Reglas importantes como no envenenes el agua, el suelo o el aire y no dejes que la Tierra sea superpoblada y no toques el termostato, han sido rotas. Buckminster Fuller dijo que la nave espacial Tierra estaba tan ingeniosamente diseñada que nadie tiene ni idea de que estamos a bordo de una, volando a través del Universo a un millón de millas por hora, sin necesidad de cinturones de seguridad, con un montón de sitio y comida realmente buena. Pero todo esto está cambiando.
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"Haz lo que es necesario hacer" |
Hay algo escrito con tinta invisible en el dorso del diploma que
recibiréis y, por si no habéis traído zumo de limón para decodificarlo,
yo os puedo decir qué pone: ERES BRILLANTE, Y LA TIERRA BUSCA
EMPLEADOS. La Tierra no se podría permitir mandar reclutadores o
limusinas a vuestra escuela. Os mandó lluvia, atardeceres, cerezas
maduras, jazmines en flor al anochecer, y a esa persona increíblemente
adorable con la que sales. Tomad el mensaje. Y aquí está el trato:
olvida que esta tarea de salvar el planeta no es posible en el tiempo
requerido. Que no te disuadan personas que saben lo que no es posible.
Haz lo que es necesario hacer, y comprueba si era imposible sólo una
vez que lo has hecho.
Cuando me preguntan si soy pesimista u optimista sobre el
futuro, mi respuesta es siempre la misma: si consultas a la ciencia
sobre lo que está sucediendo en la Tierra y no eres pesimista, es que
no entiendes los datos. Pero si conoces a las personas que están
trabajando para restaurar esta Tierra y las vidas de quienes no tienen
nada, y no eres optimista, es que no estás vivo. Lo que veo por todos
lados en el mundo es gente normal deseando afrontar la desesperanza, el
poder, y probabilidades incalculables para restaurar algo parecido a la
gracia, la justicia y la belleza en este mundo. La poeta Adrienne Rich
escribió, "Mucho se ha destruido. Lo he dado todo por todos aquellos
que, año tras año, perseverantemente, sin ningún poder extraordinario,
reconstituyen el mundo". No podría haber una descripción mejor. La
Humanidad se está fusionando. Está reconstituyendo el mundo, y la
acción está teniendo lugar en aulas, granjas, selvas, pueblos,
campus, empresas, campos de refugiados, desiertos, pesquerías y slums. |
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"Millones de personas están trabajando" |
Vosotros os unís a una multitud de gente bondadosa. Nadie sabe cuántos grupos y organizaciones están trabajando en los temas principales de nuestros días: cambio climático, pobreza, deforestación, paz, agua, hambre, conservación, derechos humanos y más. Éste es el mayor movimiento que ha visto el mundo. En vez de control, busca conexión. En vez de dominación, se esfuerza para dispersar las concentraciones de poder. Como los Cuerpos de Paz, trabaja tras el telón y realiza el trabajo. Con sus enormes dimensiones, nadie conoce el verdadero tamaño de este movimiento. Ofrece esperanza, apoyo, y un significado para miles de millones de personas en todo el mundo. Su influencia reside en la idea, no en la fuerza. Está hecha de profesores, niños, campesinos, gente de negocios, raperos, agricultores orgánicos, monjas, artistas, trabajadores del gobierno, pescadores, ingenieros, estudiantes, escritores incorregibles, musulmanes desconsolados, madres preocupadas, poetas, médicos sin fronteras, cristianos apenados, músicos callejeros, el Presidente de los Estados Unidos de América y, como diría el escritor David James Duncan, el Creador, el Único que nos ama de este modo tan enorme.
Hay una enseñanza rabina que dice que si el mundo está acabando y llega el Mesías, primero planta un árbol, y luego mira si la historia es verdad. La inspiración no se cosecha de las letanías sobre lo que puede sobrevenirnos; reside en la voluntad de la humanidad para restaurar, revestir, reformar, reconstruir, reimaginar y reconsiderar. “Un día finalmente sabías lo que tenías que hacer, y comenzaste, aunque las voces a tu alrededor seguían gritando sus malos consejos", es el modo en que Mary Oliver describe el moverse desde lo profano a un profundo sentido de conexión con el mundo vivo.
Millones de personas están trabajando en representación de extraños, incluso si en las noticias de la noche habitualmente sólo se habla de la muerte de extraños. Esta amabilidad de los extraños tiene orígenes religiosos, incluso míticos, e incluso raíces muy específicas en el siglo dieciocho. Los abolicionistas fueron el primer pueblo en crear un movimiento nacional y global para defender los derechos de quienes no conocían. Hasta ese momento, ningún grupo había presentado una queja, excepto en representación de sí mismo. Los fundadores de este movimiento eran enormemente desconocidos –Granville Clark, Thomas Clarkson, Josiah Wedgwood– y su meta era ridícula ante la cuestión en sí: en ese momento, tres de cada cuatro personas en el mundo estaban esclavizadas. Esclavizarse los unos a los otros era lo que los seres humanos habían hecho durante siglos. Y el movimiento abolicionista era recibido con incredulidad. Los portavoces conservadores ridiculizaron a los abolicionistas como liberales, progresistas, que se las daban de benefactores, entrometidos y activistas. Se les dijo que arruinarían la economía y llevarían a Inglaterra a la pobreza. Pero por primera vez en la Historia, un grupo de personas se organizaron para ayudar a gente que nunca conocerían, de los cuales nunca recibirían un beneficio directo o indirecto. Y hoy, decenas de millones de personas hacen esto cada día. Se llama el mundo de las organizaciones no lucrativas, sociedad civil, escuelas, economía social y organizaciones no gubernamentales, el mundo de las empresas que sitúan la justicia social y ambiental en lo alto de sus metas estratégicas. El alcance y escala de este esfuerzo no tiene igual en toda la Historia.
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