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La fuerza de los brotes tiernos |
Una manera de obtener alimentos de calidad es
cultivarlos uno mismo. Pero esto no es algo al alcance de cualquiera
por falta de espacio. En esos casos, para tener un huerto en miniatura
la solución son los germinados. Además, ninguna hortaliza puede superar
el porcentaje de vitaminas y sales minerales de los brotes tiernos.
La
alimentación cruda es la que mejor restituye los tejidos del organismo
y la germinación nos abre nuevas posibilidades: los brotes tiernos, aun
los de las lentejas y garbanzos, no son duros y, además, el proceso de
crecimiento va acompañado de una "predigestión". Del mismo modo que si
los cociéramos, los principios inmediatos comienzan su proceso: los
almidones se transforman en azúcares simples y las proteínas se
disocian en aminoácidos. Todo ello es posible porque hay una gran
cantidad de enzimas actuando según su función.
No solamente el
aumento de enzimas es espectacular, también el de moléculas de ADN y de
ARN, es decir, del núcleo de las células. Esto provoca un efecto
revitalizador y rejuvenecedor que no sólo ha sido constatado en pruebas
de laboratorio, sino que podemos comprobarlo nosotros mismos. Por todo
ello, los germinados deben tomarse preferentemente crudos, y no
calentarlos a temperaturas superiores a 37 ºC. |
Se dice que la alfalfa es la reina de los
germinados. Nos ofrece unos brotes muy delicados, con un sabor que
recuerda ligeramente al regaliz. Pero también es una de las más ricas
en nutrientes completos, junto con el trigo.
Podemos
experimentar primero con las semillas que hallemos por casa, como
legumbres, o pipas de girasol o de calabaza. También podemos comprar
semillas para germinar, e incluso hacer mezclas. Las buscaremos
biológicas. Nos sirven todos los cereales, el rábano, el nabo, el
sésamo y, cómo no, la soja. Usaremos preferentemente la judía mungo,
llamada también soja verde, porque la excesiva riqueza de la soja
blanca no la hace recomendable para su consumo en crudo. En realidad,
es la judía mungo la que se suele comercializar en forma de brotes. |
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Ingredientes para la preparación |
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Experimenta con semillas que tengas en casa o compra semillas biológicas para germinar:
- legumbres - pipas de girasol - avena |
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- pipas de calabaza - cereales varios - rábano - nabo - alforfón - guisantes |
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- sésamo - soja - judía mungo - alfalfa - fenogreco - trigo |
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Elaboración |
El primer paso es colocar las semillas. (1) Pon dos
o tres capas de granos previamente lavados en el fondo del bote de
vidrio, en relación a su anchura. (2) Cubre con agua. Añade agua no
demasiado fría, como mínimo en una cantidad tres veces superior al
volumen de granos. (3) Tapa el bote con gasa para hacer vendajes y una
goma elástica. Escurre y riega tres veces al día. (4) Ha llegado el
momento de cosechar. A los pocos días ya tendrás los brotes. Si los
quieres con clorofila, el último día exponlos a luz indirecta. |
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Vuestras sugerencias y otras aclaraciones |
* Algunas combinaciones de granos son: alfalfa con
10 % de rábano y 10 % de fenogreco, pipas de girasol y de calabaza con
avena, guisantes, trigo y alforfón. |
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