En la ciudad ocurren cada día infinidad de acontecimientos, de toda
índole y condición. Pero hoy ha habido en el Ayuntamiento de Barcelona
uno de esos al que no he querido faltar, y es que se ha presentado la
iniciativa para el cuidado del clima CeroCO2 en catalán (Zero CO2),
promovida por la Fundación Ecología y Desarrollo de Zaragoza y la Fundació Natura de
BCN. La primera, ECODES, promueve proyectos de desarrollo integral en
España y América Latina, siendo estos ecológicamente sostenibles,
socialmente justos y económicamente viables. Fundación Natura actúa
desde Catalunya dedicándose exclusivamente a la conservación de la
diversidad biológica mediante la protección, o más concretamente en la
restauración de los ecosistemas naturales.
Pues bien, el parto de CeroCO2, deseado por las dos partes, ya lleva
unos meses de vida. Se presentó en Zaragoza y hoy aquí, en BCN. Pero
¿en qué consiste?, pues simplemente en que podemos, si queremos, ser
neutros en carbono, es decir, en emisiones de CO2 si las compensamos. Y
esto ¿para qué?. Amigo, el cambio climático no se para y lo lógico es
reducir su impacto todo lo que podamos, ...transportes, sequías,
incendios, contaminación, consumo energético parriba al igual que el
calentamiento de este maravilloso planeta. Ante un cambio
climático galopante y un protocolo de Kioto que no es suficiente por
suave, nos toca a todos cuidar al clima y además deprisa, que el
petróleo barato ya se ha acabado y los lobbys sucios energéticos van a
poner muy difícil la economía solar por la vía de rápida.
CeroCO2 fomenta la responsabilidad compartida de todos los sectores
de la sociedad en la lucha contra el climático trastorno, y lo hace
ofreciéndonos herramientas para reducir las emisiones de gases
contaminantes que todos generamos en nuestra vida cotidiana. Lo primero
que promueve CeroC02 es invitarnos a reducir nuestro propio consumo
energético mediante las energías renovables, la eficiencia energética y
prácticas de consumo más sostenibles. Lo que viene después es conocer
el volumen de tus emisiones.
Pero ¿cómo se hace esto, te preguntarás? Pues las calculadoras de
CeroCO2 te están esperando, y sabrás después de usarlas cuántas
emisiones generas y de esta forma reducirlas, y si lo deseas
neutralizarlas. ¿Pero cómo neutralizo después de no olvidarme de
intentar por todos los medios reducir las emisiones de CO2? Pues cuando
termines con la calculadora y quieras quedarte neutro y más tranquilo,
el proyecto te invita a colaborar económicamente en proyectos
certificados de reforestaciones en América Latina, y como dicen los
promotores, además de contribuir con esto a combatir el cambio
climático, estarás ayudando en el desarrollo de países necesitados. Un
certificado te será entregado a ti o a la organización que se preste a
financiar su neutralidad en CO2, y para ello la reforestación y el
cuidado de bosques primarios y lo proyectos con energías renovables son
las piezas claves de la propuesta.
En algún momento se ha comentado sobre que en tecnologías eficientes
se piensa en cocinas de leña mejoradas, que están bien, pero si esta
gente conociera mejor las posibilidades de la cocina solar Ksol u otras destacadas, seguro que lo sumarían al paquete sin pensarlo.
Después de escuchar a directores y representantes políticos de las
dos ciudades y las dos fundaciones, nos han brindao una conferencia con
imágenes de las actividades de la “Sociedade de pesquisa em vida
salvajen e educacao ambiental”, sobre un proyecto de evacuación de
carbono en la selva atlántica del Brasil donde su representante,
Ricardo Gomes, ha detallado lo trascendente para la conservación que es
disponer de fondos que permitan a las poblaciones locales convertirse
en guardianes de esas fábricas de oxígeno, los apreciados bosques.
Comenzaron precisamente recibiendo fondos de empresas muy sucias de los
USA, ay, ay, ay, en fin, sea por la causa que sea y aunque sea dinero
sucio, la causa merece atenciones.
Yo, agradecido, me he preparao después mi receta personal para lucir
con alegría el título simbólico de ciudadano postKioto con mínimo
balance de CO2: redúzcase todo lo posible y un poco más el uso de
energía sucia producida por combustibles fósiles y radioactivos; o sea,
redúzcase el volumen de uso de medios de transporte con alta huella,
ósea volar poco, o sea el coche, que se puede disfrutar de otras
formas sin necesidad de ser usuario enganchado a él. Sígase comiendo
menos y más local, las proteínas animales mínimas y redúzcase el
consumo de alimentos y bienes envueltos en envases múltiples. El otro
día si me descuido me como una naranja traída desde Sudáfrica... Déjense
de consumir tonterías, marcas, excesos, cuestan demasiada energía
vital, y energía transformada en productos, distancias, residuos... que
al fin y al cabo son emisiones de CO2 por un tubo. Siempre algo más
despacio camine, coma, haga el amor, cuide a los suyos y de todos los
abrazos posibles por día, mire a los ojos agradecido, flipe con el
vuelo de cualquier ave en el parque más cercano y alucine como el
desarrollo de una lechuga en una maceta, al fin y al cabo, esas
pequeñas cosas hacen que ante los retos cotidianos, el optimismo mejore
el convivir y afronte a las hordas de ladrones de felicidad.
Para la visita a la página de CeroCO2
date un rato, ilústrate sobre que es el cambio climático y sus
consecuencias, calcula emisiones y redúcelas, al final las que te
quedan y si quieres, puedes invertir en compensarlas, algo que no le va
mal al medioambiente de este planeta. |