Cada vez más estudios científicos demuestran que la meditación aporta salud. Sin embargo, las posturas estáticas resultan incómodas o extrañas para muchas personas. Una revisión de otras técnicas meditativas ayuda a conocer formas dinámicas, como el caminar, que también permiten lograr la tranquilidad mental. La autora nos sumerge en ese mundo de la meditación son técnicas y métodos en ocasiones sencillos y abarcables de forma rápida. Considera a la meditación una experiencia eminentemente interior y estática. Y es cierto que existe una variedad de técnicas meditativas en las cuales el cuerpo permanece quieto, pero también hay formas de meditar en movimiento que se encuentran entre las más complejas y eficaces. Son quizá las más apropiadas para las personas inquietas, que no acaban de soportar la paralización característica de las técnicas más conocidas. La meditación puede entenderse como un procedimiento psicofísico –no exclusivamente mental– que tiene por objetivo desarrollar estados de conciencia elevados o más afinados que han sido descritos en todas las culturas. También podría definirse como la liberación de los hábitos que encadenan el pensamiento ordinario. Si bien es un camino que acompaña a algunos hacia la «iluminación», el «estado de gracia» o el «nirvana», también lleva a los practicantes más humildes a una mayor armonía entre cuerpo y mente, un mejor conocimiento de las propias tendencias psíquicas profundas y un funcionamiento mental ordinario más eficaz y ecuánime. Ya que estamos diseñados para movernos, nos lleva de viaje por el ‘despertar’ de los derviches, un tipo de meditación sufí. El ritual para el ‘samadhi’, islámico. Por el lento caminar budista, las danzas espirituales, y nos anima a meditar realizando cualquier actividad, lo más sencillo andando, se puede meditar mientras se anda, se come, se bebe o se practica un deporte. El Tai-chi, no propone el equilibrio mental, Se cita la importancia de la atención y se repasan los mitos sobre la meditación, aquí comentados –Necesitas estar sentado en posición de loto; se requiere una tranquilidad absoluta; hay que aprender previamente; si pierdes el foco de atención, estás haciendo algo mal; la meditación te convierte en alguien pasivo y contemplativo; te conviertes en alguien impasible; serás incapaz de meditar si tienes mucho trabajo; meditar es demasiado duro, la meditación es una religión. Una invitación a cortar con ellos y hacer de la meditación un espacio cotidiano de calma mental, tan necesaria en estos días. |