Alimentación, medio ambiente y salud. Estado de la cuestión

El deterioro de las condiciones medioambientales, ocasionadas sobre todo por los seres humanos, constituye uno de los principales riesgos sobre la salud de las personas. Las alteraciones ambientales derivadas de la contaminación, la degradación ambiental, la deforestación y la pérdida de biodiversidad no sólo están afectando a los ecosistemas o el clima, sinó que también tienen repercursiones sobre la salud de las personas, siendo los niños, ancianos y enfermos los grupos más vulnerables a estos cambios. Existe una evidencia real de que el ser humano está interfiriendo en gran parte de los procesos del funcionamiento de la biosfera y esto nos enfrenta a desafíos como el cambio climático, la falta de acceso al agua potable o la extinción masiva de especies. La empresa de seguros DKV en colaboración con la Fundación Ecología y Desarrollo han colaborado para crear el Observatorio DKV de Salud y Medio Ambiente cuyo objetivo es contribuir a un mayor conocimiento de la relación existente entre medio ambiente y salud. En su primer informe Alimentación, Medio Ambiente y Salud (accesible en formato PDF) se analiza cómo los alimentos son una de las principales vías de entrada a nuestro organismo de sustancias que pueden tener efectos tóxicos.

zoom

Portada del informe del Observatorio DKV de salud y medio ambiente en España 2008.

Los apartados que desarrolla el informe son:

Metales pesados en la dieta: se trata de ciertos metales pesados que se encuentran en el aire, las plantas o en otros animales. En general, se dan en concentraciones bajas que no suponen un riesgo para la salud, excepto en situaciones excepcionales.

La química está servida, plaguicidas y otros compuestos tóxicos persistentes: los llamados Compuestos Orgánicos Persistentes (COPs) proceden básicamente de plaguicidas y otros compuestos químicos que se encuentran en el ambiente. Estos elementos se acumulan en los tejidos grasos de los organismos vivos.

Agua de consumo y salud: el agua contiene sustancias, partículas disueltas y microorganismos que pueden alterar su equilibrio y tener efectos novicos en nuestro organismo; asimismo, la contaminación microbiológica del agua es uno de los problemas sanitarios más importantes en el mundo.

Se trata de un informe nada sesgado y elaborado por expertos de primer nivel en cada una de las materias que se abordan. Las temáticas abordadas son igualmente desgranadas a partir de datos científicos que corroboran cada una de las afirmaciones de los autores. Y sin embargo, estamos frente a un informe con un lenguaje asequible a la mayoría del público. Lógicamente, algunos de los temas no son sencillos de comprender.

La infografía de la obra se convierte pues en una valiosa ayuda para que el lector comprenda mejor desde el ciclo de la dioxina, (esa familia de sustancias químicas reconocidas como los productos químicos más tóxicos que el hombre ha sido capaz de sintetizar que forman parte una familia química más amplia: los organoclorados) al ciclo biogeoquímico del mercurio.

Conocer las fuentes de contaminación de los metales pesados, como afectan estos a nuestro metabolismo y cual es su presencia en los alimentos constituye la base del primer capítulo. Este aborda pues la problemática del mercurio, el cadmio y el arsénico.

Sobre los plaguicidas y compuestos tóxicos persistentes (COPs) se aborda la problemática de la llamada bioacumulación o proceso por el cual un organismo absorbe y retiene un contaminante del medio donde vive y de como este puede biomagnificarse a medida que pasan de un nivel de la cadena alimentaria a otro. Y así se constata que en el mundo actual las personas nos encontramos expuestas a COPs desde los primeros momentos de la vida, incluso en el seno materno hasta la muerte. Que los estudios actuales no permiten predecir los efectos de esta contaminación alimentaria en un futuro. Pero lo cierto es que cada vez aparecen más casos de persones afectadas por el síndrome de Sensibilidad Química Múltiple (SQM).

Finalmente, del capítulo dedicado a los riesgos actuales sobre el agua de consumo para la salud se señala el principal problema es la falta de agua y la presencia de microorganismos patógenos y que hoy ya no basta con la desinfección (a parte que esta misma puede desembocar a subproductos tóxicos como las . El agua de consumo en muchos lugares excede las concentraciones de nitratos y nitritos recomendados por la Organización Mundial de la Salud o que incluso ya se encuentran trazas de COPs y de medicamentos.

Ilustración de la ficha del informe.

En definitiva,  estamos frente a un informe que bien merece una lectura atenta pues nos advierte sobre la importancia de la alimentación, nuestra mejor medicina.

Modificado
09/02/2017

Suscríbete a Terra Boletines

Te mantendremos al día de lo que hacemos

Ayúdanos a buscar soluciones para la #emergenciaclimática

Puedes contribuir a reducir las emisiones de CO2, y fomentar la investigación científica en ecología práctica
 

Dona ahora

 

Facebook Twitter YouTube LinkedI