Albert Einstein afirmó que “el hombre y su seguridad deben constituir la primera preocupación de toda aventura tecnológica”. Sin duda esto no se cumple en el caso de los organismos modificados genéticamente (OMG) como se narra en La verdad sobre los transgénicos. Nuestra salud está en juego publicada por Icaria Editorial en una colección que se caracteriza por ofrecer textos con un lenguaje preciso pero carente de tecnicismos que intenta contar las causas de los mayores problemas de nuestro tiempo.
La verdad sobre los transgénicos
Nuestra salud está en juego
Corinne Lepage
Icaria Más Madera
Barcelona, 2013.
La verdad sobre los transgénicos narra las pesquisas realizadas por el Comité de Investigación de de Información Independiente sobre la Ingeniería Genética (Criigen) en un experimento único en el mundo y cuyas conclusiones aclaran el verdadero peligro de los transgénicos que las multinacionales niegan. Algo similar pasó en los años 60 cuando Rachel Carson denunció en su bestseller Primavera silenciosa el nocivo efecto de los pesticidas y las empresas químicas lo negaban con informes supuestamente científicos.
El caso es que el Criigen accedió a los estudios realizados con el maíz OMG Mon863 que produce un pesticida en el que se sometió a un grupo de ratas tratadas con OMG y otras sin. El resultado después de un tratamiento de tres meses las ratas que habían sido alimentadas con el maíz transgénico habían aumentado un 40 % sus grasas, un 10 % el azúcar y el 7 % del peso del hígado comparándolas con las alimentadas de manera tradicional. Este es tan sólo uno de los experimentos narrados en este libro.
Las multinacionales pusieron todas las pegas para acceder a esta información y extraña que los comités de expertos de los países que deben autorizar las semillas de OMG pasen por alto estas atroces conclusiones para la salud. Lo cierto es que nadie habla de los OMG consumidos directa o indirectamente a través de la cadena alimentaria ni de sus consecuencias sobre la salud humana. Por ejemplo, para el amianto o para los pesticidas existen como mínimo estudios contradictorios que han ayudado a la causa de los “sembradores de dudas. Pero en lo que se refiere a los transgénicos, el lobby ha podido actuar con gran eficacia en las altas instancias gubernamentales cortocircuitando cualquier estudio opuesto. Corinne Lepage detalla en este libro todas estos desmanes empleados por las multinacionales que venden OMG donde los expertos y los políticos se pasan por el forro su responsabilidad para garantizar la salud pública.
La verdad sobre los transgénicos es una advertencia de que ya no podemos esperar de los poderes públicos que asuman la defensa del bien común. En este sentido el experimento promovido por el Criigen detallado en este libro es una evidencia de lo importante que es la sociedad civil para hacer frente a la irresponsabilidad política y de las multinacionales. La iniciativa del Criigen se inscribe en esta nueva perspectiva en la que no podemos permitirnos ni esperar, ni lamentarnos, ni hablar mal de nuestros adversarios sino que simplemente debemos actuar. En el tema de los transgénicos las informaciones contradictorias lanzadas por las multinacionales seguirán intentando sembrar la duda, pero los estudios independientes y experimentos como los de Criigen nos pueden dar aliento para actuar evitando cualquier alimento que contenga OMG y que debe constar en la etiqueta de producción por imperativo legal.
Aunque el 8 % de las tierras agrícolas en el mundo producen OMG el 92 % no los producen. En Europa es sólo un 0,1 % aunque en España es el país que más transgénicos se cultivan pues el Gobierno español y autonómico está al servicio de empresas como Monsanto y otras multinacionales del sector de los OMG. La acción ciudadana es importante y libros como La verdad sobre los transgénicos ayudan a tomar conciencia para no ser sumisos.
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