La doctora de Brest

Incluso con evidencias en las contraindicaciones, la industria farmacéutica no tiene problemas para comercializar medicamentos. Le corresponde al Estado vigilar para que dilucidar el grado de toxicidad de un medicamento para la población. Es una situación absurda en la que las leyes están hechas a medidas de un sector industrial que se lucra con lo más preciado que tiene el ser humano: su salud.

La doctora de Brest es una película basada en la adaptación del libro de denuncia sobre los efectos mortales del medicamento Mediator por parte de la Dra Irène Frachon que trabajaba en un hospital de la ciudad bretona de Brest. La otra mitad se compone de relatos de primera mano, de los secretos de la gente y especialmente de personas como el epidemiólogo Gustave Roussy, el "topo" de la CNAM [agencia de salud francesa] que la puso sobre la pista. 

Por tanto, el trabajo de La doctora de Brest (La fille de Brest) se basa en un guión a partir del libro pero que, sobretodo, explora experiencia humana de la Dra. Frachon, gracias a la maestría de la guionista Sévérine Bosschem quien trabajó de forma independiente junto a la directora del film, Emmanuelle BERCOT. La película recopila pues los miles de documentos que le había dado Irène Frachon a la guionista, y para darnos una idea de lo complejo, lo cierto es que se tardaron unos tres años en escribir la película.

Es una película curiosamente hecha por mujeres en la que pretende que el espectador se identifique con la batalla que libra Irène Frachon, pero sobretodo que nos transmite lo que siente, la energía que tiene que desplegar para que las cosas avancen. Los aspectos técnicos, que al principio del film son importantes, luego se convierten en un tema menor.

Esta película algunos la consideran análoga a la de la norteamericana Erin Brockovich, pero el caso de Irène Frachon es más bien el de una médico de vocación, una buena facultativa con instinto y capacidad para diagnosticar. Una persona que sacó sus fuerzas de la empatía que sentía con las víctimas, pero también de sus convicciones éticas y morales. Aunque el caso que denunció del Mediator, más bien estaría en la trama de la denuncia del film El jardinero fiel.

Irène Frachon lucha por una causa justa. Es pura y su candor le impide ver el mal, una médico que sólo se dedica a tratar y a cuidar a las personas. No busca el poder y por lo tanto nunca tuvo miedo a arriesgarse. Una pesona apoyada profundamente por su familia y valiente.

La doctora de Brest también recoge el caso del juicio de los "delatores" de la sanidad francesa que fueron juzgados en Luxemburgo y condenados. Irène Frachon dijo muchas veces que debería existir una ley que castigue a los que atacan a los delatores de un crimen. Irène Frachon cita a Albert Einstein en este tema: "El mundo es un lugar peligroso para vivir, no por los que hacen el mal, sino por aquellos que no hacen nada al respecto." La película no nos permitirá más que seguir algunas trazas de esta lucha contra uno de los mayores laboratorios franceses y que todavía está pendiente de una sentencia clara a pesar de los efectes mortales del Mediator.

La toxicidad mortal del Mediator
El escándalo Mediator se inicia con la publicación en 2010 del libro titulado: “Mediator 150mg: Sous-Titre Censuré?” escrito por la neumóloga francesa Irène Franchon. Tras la publicación de este libro se iniciaron numerosas demandas que terminaron con una investigación gubernamental en  los tribunales franceses en 2012 cuando al menos 500 consumidores (hasta 1.800 según otras fuentes), según la Agencia del Medicamento de Francia, habían fallecido por tomar Mediator.

El Mediator fue un medicamento muy popular prescrito como un inhibidor del hambre para personas diabéticas con sobrepeso. Pero pronto se extendió como adelgazante para todo tipo de problemas de sobrepeso. Entre 1976 y 2009 se vendieron más de 245 millones de cajas , según los datos de la Seguridad Social francesa cinco millones de personas tomaron durante 33 años este adelgazante elaborado con benfluorex, una sustancia era sdesde 1993 sospechosa de producir patologías cardiopulmonares mortales.

El fabricante, Laboratorios Servier es el segundo laboratorio de Francia, de la fortuna número 17 del país (2.800 millones de euros, según el ranking de Challenges), y su propietario fue distinguido con la Cruz de la Legión de Honor en 2008. Jacques Servier, quien creó una de las mayores Compañías Farmacéuticas francesas falleció en París el 16 de abril (2014) a los 92 años de edad.

Las primeras sospechas clínicas surgieron en 2004 aunque ya en 1993, el benfluorex el principio activo de Mediator había sido en entredicho por los investigadores B. H. Gordon y P. W. Vis que advirtieron que en el proceso de degradación natural del fármaco se producía la norfenfluramina, substancia que se asocia a problemas cardiacos que es realmente el compuesto peligroso.En 2005 Italia y España (se comercializaba con el nombre de Modulator) retiraron del mercado las pastillas, y las autoridades francesas previnieron en 2006 sobre los riesgos. Pero habbrá que esperar a 2009, cuando la Dra. Irène Frachon, neumóloga de un hospital de Brest, denunció 11 casos de valvulopatías causadas por Mediator.

El caso Mediator llegó a juicio en 2012 y sin duda puso en jaque el funcionamiento de los sistemas estatales de vigilancia sanitaria. Otros fármacos de Servier basados en la norfenfluramina ya fueron prohibidos en 1997. El juzgado de Nanterre, se suspendió al poco tiempo. No ha sido hasta septiembre 2015 que la justicia francés reinició seriamente por primera vez juzgar la responsabilidad del laboratorio Servier en el caso.
Más allá de las conclusiones a la que pueda llegar el juicio, el caso muestra la responsabilidad de los médicos que lo recetaban, el autismo de la Agencia del Medicamento y a la Seguridad Social de Francia, que no lo prohibió aún conociendo las sospechas. 

El Mediator es un buen ejemplo sobre la dependencia de los organismos gubernamentales encargados de la regulación de medicamentos, y la connviencia entre algunos laboratorios y algunos altos funcionarios gubernamentales.

Cartel de la película La Doctora de Brest.

Ficha técnica
Título original: La fille de Brest
Directora: Emmanuelle BERCOT
Guión: Sévérine BOSSCHEM y Emmanuelle BERCOT, basada en el libro de Irène FRACHON "MEDIATOR 150 Mg" (publicado en Francia por Editions Dialogues)
Actores:  Sidse Babett Knudsen, Benoît Magimel, Charlotte Laemmel, Isabelle De Hertogh, Lara Neumann, Philippe Uchan, Patrick Ligardes, Olivier Pasquier, Gustave Kervern, Myriam Azencot, Pablo Pauly, Eddie Chignara, Raphael Ferret, Christophe Meynet, Gilles Treton, Garance Mazureck
Música original: Martin WHEELER, Bloum
País: FRANCIA
Año:2016
Duración:  128 min – SCOPE – 5.1
Distribución en España: CARAMEL FILMS
Estreno: 18 de noviembre 2016
Sinopsis: Biopic basado en la historia real de la doctora Irène Frachon (interpretado por Sidse Babett Knudsen), la mujer que en 2010 fue clave para denunciar a la industria sanitaria y farmaceútica francesa, por permitir la comercialización del Mediator, un controvertido medicamento cuyos efectos secundarios provocaron la muerte de cientos de personas.
 

Artículo elaborado por la redacción de terra.org a partir del Press Book de Caramel Films e investigación propia.

Modificado
09/02/2017

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