Lucky, viaje hacia la eternidad

Lucky es la historia de un ateo endurecido, un veterano de la Marina de EE. UU. que reside en una remota ciudad en el desierto, un hombre sobre todo de hábitos. Después de comenzar cada mañana con un régimen de yoga intensivo, se pone una camisa a cuadros, botas y un sombrero de vaquero y se dirige a un bar cercano para tomar una taza de café y terminar un crucigrama. Por la tarde se va a comprar cigarrillos o leche, y por la noche discute hasta bien entrada la noche con los habituales de un night club.

Un dìa Lucky se derrumba repentinamente en su casa y teme los comienzos de una trama que se pone en marcha, una que, de acuerdo con las tendencias sentimentales de otras películas que superficialmente se parecen a esta, podría terminar con nuestro héroe en una habitación del hospital. Afortunadamente, "Lucky" elude esos clichés. La razón de su caída nunca se explica, y su médico (Ed Begley Jr.) proclama que tiene una salud irrazonablemente buena. "Eres un hijo de puta duro", dice, admitiendo que en este punto, incluso dejar de fumar probablemente haría a Lucky más daño que bien.

Estamos frente a una meditación sobre la moralidad, la soledad, la espiritualidad y la conexión humana. John Carroll Lynch, director de Lucky, nos ofrece a la vez una carta de amor a la vida y un homenaje a la carrera de un actor de la talla de Harry Dean Stanton.

Lucky, que no cree en la vida después de la muerte, no va a cambiar su postura y no está particularmente interesado en afirmar o negar su punto de vista sobre la existencia humana. La película nutre una silenciosa sensación de misterio, contenida en el conocimiento de que ni una mentalidad optimista ni una actitud cruel y nihilista pueden realmente capturar la experiencia completa de la vida cuando esta se vive con coherencia a lo que uno desea. Así, cuando una camarera del bar (Yvonne Huff) pasa por su casa para ver cómo está él después de su caída, no le gusta mucho, pero ambos acaban fumando un porro y viendo una vieja serie de televisión; un interludio adorable y melancólico que refleja el miedo de Lucky mientras espera la Nada.

El entorno del protagonista es una población del desierto, en un espacio más bien parecido al de la pequeña ciudad que asume la versión más polvorienta y menos malévola que la de  Twin Peaks, una serie que le dió a Stanton uno de sus otros papeles finales en la pantalla. Sin embargo, este último decorado es a la vez la metáfora de lo inexorable en  un accidentado paisaje desértico con los cactus como protagonistas y una tortuga librepensadora que se ha escapado de su dueño (encarnado por David Lynch). Un espacio por el que se camina  lenta pero decididamente hacia el último destino.

Stanton es el personaje principal de Lucky, que toma el nombre del apodo del personaje que fue en sus remotos días como marine. Una encantadora fotografía del joven Stanton, un marinero con suerte en la vida real durante la Segunda Guerra Mundial, contrasta en el film con su ahora flácido cuerpo, vestido con ropa interior blanca y andrajosa. En este entorno se mueve un hombre cuya ciudad es suficientemente pequeña como para que éste pueda ir a todas partes simplemente andando y satisfacer de forma simple sus rutinas sin más.

Lucky se mueve lentamente, y los crucigramas que lo absorven son la excusa para una reflexiona sobre la naturaleza de la Vida. Ver lo que realmente existe y "estar preparado para enfrentarlo en consecuencia" es el tema principal. Quienes lo rodean evalúan su impresionante edad y danzan frente a la invitación que ya le brinda la muerte desde la trastienda. "Esas cosas te van a matar", dice el dueño del restaurante sobre los cigarrillos que Lucky habitualmente intenta encender en el mostrador. Pero su respuesta no es menos hábil: "Si pudieran, lo habrían hecho ya".

En el film hay claramente guiños a la vida real de Stanton, como su predilección por tocar la armónica, un momento musical cerca del final que permite al espectador recuperar el aliento. Una película audaz pero frágil, completamente inquietante cuya histoira simple absorbe de forma exquista. Lucky es ya una obra maestra que habrá que atesorar para dar una idea diferente al significado de la Vida y la Muerte y en el que su protagonista de repente se abre a esta inmensidad vital todo su corazón.  Una obra que inspira también el concepto de vivencia temporal que se ofrece desde ecofuneral.

Ficha técnica
LUCKY sigue el viaje espiritual de un hombre ateo de 90 años de edad rodeado de personajes peculiares que habitan en sus alrededores en un pueblo del desierto. Habiendo vivido y atormentado a todos sus contemporáneos, Lucky un hombre de vida independiente se encuentra en el precipicio de su vida terrenal. Empujado hacia un viaje de auto exploración, este le conduce hacia lo que a menudo es inalcanzable: la iluminación. El film es una meditación sobre la moralidad, la soledad, la espiritualidad y la conexión humana. John Carroll Lynch, director de Lucky, nos ofrece a la vez una carta de amor a la vida y un homenaje a la carrera de un actor como Harry Dean Stanton.

El actor
Harry Dean Stanton, un veterano actor amado por su aspecto de pocos amigos, contaba en su elenco con la participación de más de 200 apariciones en cine y televisión a su nombre. A los 91 años, murió por causas naturales el 15 de septiembre 2017, unas días antes del estreno comercial en cines de su última película, Lucky (29 de septiembre en Estados Unidos).

Nacido en Kentucky en 1926, Stanton sirvió en la Marina de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial. Estudio en el famoso Pasadena Playhouse y tras ello dedicó literalmente décadas de trabajo como actor de televisión apareciendo (a veces varias veces) en una serie de películas de la TV y thrillers de crímenes, como Rawhide, Gunsmoke y Bonanza.

La gran revelación de Stanton finalmente le llegó en 1984, cuando en el mítico film París- Texas de Wim Wenders fueron aprovechadas plenamente las fortalezas del actor transmitiendo la soledad y la angustia de forma magistral. Stanton participó en otras cintas, con papeles más o menos secundarios, como Alien (1979), de Ridley Scott; Rescate en Nueva York (1981), de John Carpenter; La chica de rosa (1986), escrita por John Hughes; y La última tentación de Cristo (1988), de Martin Scorsese entre muchas otras. En esta última aparición como protagonista en Lucky tanto el argumento como la interpretación de Stanton sirve como un escaparate de primera clase para este impresionante actor. Su última canción fílmica como artista no le podía haber salido mejor.

 

 

Director: John Carroll Lynch
Reparto: Harry Dean Stanton, David Lynch, Ron Livingston, Ed Begley Jr., Tom Skerritt, Beth Grant, James darren, Barry Shabaka Henley, Yvone Huff Lee
Fotografia: Tim Suhrstedt
Música: Elvis Kuehn
Guión: Logan Sparks y Drago Sumonja
Distribución: Avalon
País: Estados Unidos
Año: 2017
Duración: 88 min
Género: Drama
Estreno en España: Mayo 2018

Modificado
06/05/2018

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