Ralph Waldo Emerson preguntó una vez qué haríamos si las estrellas sólo salieran una vez cada miles de años. Nadie dormiría esa noche, por supuesto. El mundo se haría religioso durante la noche. Estaríamos extáticos, delirantes, entusiasmados por la Gloria de Dios. En vez de ello, las estrellas salen cada noche, y nosotros vemos la televisión.
Este momento extraordinario, en el que somos globalmente conscientes los unos de los otros y de los múltiples peligros que amenazan la civilización, no ha sucedido nunca antes, ni en mil años, ni en diez mil años. Cada uno de nosotros es tan complejo y hermoso como todas las estrellas en el Universo. Hemos hecho grandes cosas y nos hemos desviado del camino en términos de honrar la creación. Os estáis graduando en el reto más increíble, desafiante, pasmoso, que jamás ha heredado una generación. Las generaciones anteriores a vosotros fallaron. No se quedaron despiertos toda la noche. Se distrajeron y perdieron de vista el hecho de que la vida es un milagro en cada momento de tu existencia. La Naturaleza te hace señas para que estés de su parte. No podrías pedir un jefe mejor. La persona menos realista del mundo es el cínico, no el soñador. La esperanza sólo tiene sentido cuando no tiene sentido tener esperanza. Éste es vuestro siglo. Tomadlo y corred como si vuestra vida dependiera de ello.
Paul Hawken es un renombrado emprendedor, un visionario activista ambiental y autor de numerosos libros, como el reciente "Blessed Unrest: How the Largest Movement in the World Came into Being and Why No One Saw It Coming". Le fue entregado un doctorado honorífico por el presidente de la Universidad de Portland, el padre Bill Beauchamp, C.S.C., en mayo, marco en el que ofreció este soberbio discurso.
|