Abril, 2013.- Nunca veremos las calles empapeladas con lustrosas modelos luciendo sus colecciones de ropa. Pero más allá de lo que muestra la publicidad masiva, hay otras opciones para vestir ecología con diseño y criterios de sostenibilidad. Por ejemplo, en nuestro país la empresa vasca Skunkfunk cree en una forma diferente de hacer moda, marcando la diferencia en diseño y sostenibilidad, y está presente en cuatro continentes y más de mil tiendas. En otra dimensión, existe Ecoology,  una microempresa nacida del sueño de un creadora de moda barcelonesa, Eva García, en un intento por cuidar y mimar la estética de la mujer a través del vestir, con ropa ecológica de culto, pero con una clara identidad ética, dinámica y muy cool.

La ropa de Ecoology se distribuye esencialmente a través de internet aunque también puede encontrarse en algunas tiendas exclusivas (cuatro puntos de venta en Barcelona, Girona y Madrid). Son piezas de ropa esencialmente de producción artesanal y bajo demanda. La firma de Eva García sigue la estela de otras diseñadoras de moda eco-chic como Stella McCartney. La firma Ecoology ofrece un catálago de temporada en el que, especialmente la mujer, puede escoger tendencias de pasarela pero realizadas con tejidos ecológicos, orgánicos y naturales que utilizan materias primas cultivadas con agricultura ecológica, como tencel, algodón, bambú, lana, lino, tejido de leche y tejido de algas, así como materiales reciclados.

Algunos de las propuestas de moda ecológica de Ecoology.
 

Su ropa se caracteriza por ser como una segunda piel sobre el cuerpo y lo siluetea mientras le pone a su vez color, textura y forma. Nos parece que las propuestas de Ecoology son una opción más o menos al alcance de la mayoría de consumidores de moda ecológica, con diseño urbano y femenino, made in Barcelona. La gran diferencia con otras propuestas es que es una opción a favor de la producción local con una selección esmerada de los tejidos que emplea. Y son precisamente estos tejidos empleados, -avalados con certificados ecológicos-, el elemento clave que distingue la propuesta de Ecoology respecto a la de cualquier otra propuesta.  

Como consumidores tenemos que aprender a valorar los esfuerzos que hay detrás de la producción local  y saber que, con el precio que pagamos, también apoyamos un compromiso fehaciente y una forma realmente efectiva de hacer frente a la globalización y los problemas sociales y ambientales que conlleva. A pesar de los esfuerzos que algunas multinacionales publicitan para atajar el esclavaje laboral o la contaminación salvaje, cuando no el envenenamiento directo con sustancias tóxicas, que ha comportado la globalización de la producción de bienes de conusmo. 

Sostenibilidad y responsabilidad

La firma de Eva García parte de la visión que sólo puede incorporar productos naturales en sus procesos de producción ya que en ellos reside la clave de la protección del medio ambiente, a la vez que se obtiene un producto natural que satisfaga completamente las necesidades de los clientes.  Algunos de las ideas fuerza de Ecoology son:

- La ropa ecológica no es la que se utiliza para ir a la naturaleza, sino la que viene de ella.
- Los tejidos orgánicos son más caros, pero el producto final no tiene por qué serlo.
- La moda no tiene que ser superficial, pues la belleza no está reñida con el compromiso.

Para la empresa vasca Skunkfunk, la apuesta eco pasa por el empleo del poliéster reciclado que permite dar una segunda vida más glamourosa y sostenible a las botellas de plástico usadas; la fibra lyocell que es un tejido muy ligero, de textura agradable y con una elegante caída que se fabrica a partir de fibras de madera obtenidas de bosques gestionados de forma respetuosa y sostenible; el algodón orgánico obtenido de cultivos que no emplean ni pesticidas ni manipulación genética y se ahorra agua en el proceso de fabricación y finalmente el lino una fibra natural y renovable pues procede de una planta. Igual que el algodón orgánico el lino que emplean procede de cultivos ecológicos, pero el consumo de agua en la fabricación del lino es menor que en la producción del algodón.

¿Y si las fábricas limpiasen el aire en lugar de contaminarlo?

El mundo de la moda tiene la responsabilidad y la capacidad de construir este mundo también lleno de colores pero libre de tóxicos y de contaminación. Por su parte Skunkfunk apuesta para que el contraste entre colores sea  fuerte y limpio, que los tejidos cuiden nuestros cuerpos pero que "podamos ver a las abejas tan contentas como si estuvieran sobre las flores de algodón orgánico".

Sin duda, en el mundo de la vestimenta y la moda quedan muchos obstáculos que hay que superar, pero la clave está los pequeños gestos. La ropa ecológica empieza a abrirse camino entre los consumidores, pero la sostenibilidad es también la creación de colecciones que soporten las diferentes tendencias que no sean tan "temporales" y que ofrezcan prendas que pueden utilizarse en diferentes ocasiones y de varias formas. Al considerar la sostenibilidad de una prenda de vestir, es pues necesario que las materias primas no se obtengan de materiales no renovables (fibras sintéticas). La clave de una estrategia de sostenibilidad en el ámbito de la ropa está pues en la sustitución de las fibras convencionales elaboradas con derivados del petróleo por fibras ambientalmente amigables (eso pasa también para que  las fibras naturales se obtengan de cultivos con agricultura ecológica, libres de pesticidas y fertilizantes sintéticos).

Captura de pantalla de una de las colecciones de vestimenta de Skunkfunk para el 2013.

Andar con la ropa bien puesta

Cuando vayamos por la calle y las pancartas gigantescas nos anuncien la moda de la estación de turno, pensemos que, más allá del hábito de vestir diferente, tenemos la opción de optar por lo barato, -eso sí con criterios de sostenibilidad-, o dar un paso más allá y cerciorarse de que, además de materias primas ecológicas, sean de producción local. Aquí te hemos dado dos ejemplos de empresas españolas del mundo de la moda comprometidas con la sostenibilidad.  Cuando miremos la etiqueta del precio no pensemos sólo en nuestro monedero, sino que con una compra podemos estar contribuyendo a crear empleo en nuestro país y a dar valor a la creatividad de conciudadanos.
 

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