15 enero 2002.
El consumo eléctrico en España ha crecido casi un 6 % en el pasado año
2001 que ya acumula el 30% desde 1997. Nadie previó este importante
crecimiento aunque las tarifas no han parado de bajar. Lo cierto es que
las compañías eléctricas se quejan que no han mejorado sus ingresos por
causa de las bajadas en las tarifas. Se excusan así ante las críticas
por no invertir en mejorar el suministro. Además disponen de una excusa
perfecta para justificar los apagones y corte de suministro frente las
olas de frío y calor. Sin embargo, la mejor inversión eléctrica es la
que permite ahorrar watios/hora. Nuestros hogares, industrias y
servicios malgastan energía eléctrica a raudales. Las dificultades
técnico-administrativas para generar electricidad con energía renovable
en el ámbito doméstico y la llamada cogeneración ponen la guinda en el
desaguisado eléctrico español.