15 mayo 2002.
El número de coches en el mundo sobrepasa los 500 millones de unidades.
En algunas ciudades hay un automóvil por cada dos personas. No es
extraño que las circulación por las ciudades actuales no sea superior a
la de los coches tirados por caballos de hace dos siglos. Lo cierto es
que los atascos forman parte de nuestro paisaje cotidiano y una
curiosidad más de las noticias matutinas. En Los Ángeles, sus
ciudadanos pierden alrededor de 56 horas al año en el interior de su
vehículo inmovilizado en el caos circulatorio. Los costes en
combustible quemados y el tiempo perdido en la carretera cuesta en los
Estados Unidos alrededor de 4.500 millones de horas perdidas y el
derroche de más de 26.500 millones de litros de consumo en gasolina. A
medida que el coche gana espacio en nuestras ciudades los ciudadanos
perdemos en calidad de vida a la vez que contaminamos nuestro entorno.
En el futuro sólo el transporte colectivo y un mejor diseño de las
ciudades puede evitarnos los millones que perdemos en los atascos
diarios.